¿Por qué pasarse a la tecnología eléctrica?

Las ventajas cada vez mayores que ofrece la electrificación de las carretillas elevadoras

¿Está pensando en pasar de las carretillas contrapesadas de diésel o GLP a las eléctricas? Mark Nicholson nos presenta un resumen de los argumentos cada vez más convincentes en favor de la electrificación.

Tradicionalmente, las carretillas elevadoras con motores de combustión eran la opción obvia cuando se buscaba fortaleza y durabilidad. Hoy en día, las mejores alternativas eléctricas pueden competir en potencia y soportar las condiciones más difíciles. En aplicaciones anteriormente dominadas por las carretillas con motor de combustión, ahora puede disfrutar de las muchas ventajas de la tecnología eléctrica.

Una de las principales ventajas típicas que ofrecen es la realización de tareas de diagnóstico y resolución de problemas de manera sencilla a través de un conector.

Por supuesto, en algunos entornos de trabajo, el paso a los vehículos eléctricos es una obligación legal. Los reglamentos sobre emisiones de escape en espacios cerrados se están endureciendo. Quizá también se enfrente a la presión legal para reducir la huella de carbono de su empresa. Por otro lado, iniciativas ecológicas como las subvenciones públicas y las deducciones fiscales pueden estar animándole a dar el salto. Estar concienciado de su responsabilidad medioambiental es, sin duda, otra buena razón: sus clientes también querrán conocer qué compromiso tiene usted con la sostenibilidad.

No obstante, una justificación convincente para pasarse a la tecnología eléctrica es que aumentará sus beneficios. Como verá a continuación, las carretillas elevadoras eléctricas presentan unas importantes ventajas en el ámbito práctico y de productividad. También reducen el coste total de sus operaciones (TCO).

¿Qué pueden hacer por usted las carretillas elevadoras eléctricas?

1. Erradicar las emisiones

Los nocivos gases de escape y las partículas contaminantes pueden provocar enfermedades respiratorias y agravar problemas de salud ya existentes. Con cero emisiones, sin tubo de escape, las carretillas elevadoras eléctricas se traducen en un aire más limpio en el lugar de trabajo. Si, además, la electricidad usada para cargarlas se genera sin quemar combustibles fósiles, también reducen las emisiones de carbono globales.

2. Mejorar la eficiencia energética

El uso eficiente de energía reduce los costes de operación. Además, contribuye a reducir su huella de carbono. Los motores y controladores más recientes para carretillas elevadoras eléctricas son altamente eficientes. Otras prestaciones típicas que ahorran energía en estos vehículos son los frenos electromagnéticos y las luces led. Para un consumo aún menor, pueden programarse con limitación de velocidad. Asimismo, en muchas carretillas eléctricas se puede elegir entre baterías de ácido-plomo o iones de litio. Los iones de litio ofrecen rendimiento, eficiencia y autonomía mayores.

3. Ahorrar en mantenimiento

Con menos piezas móviles que mantener y sustituir de manera rutinaria, las carretillas elevadoras eléctricas permiten ahorrar en gastos de mantenimiento. Su servicio rápido y fácil reduce al mínimo el gasto en piezas, mano de obra y tiempo de inactividad. Una de las principales ventajas típicas que ofrecen es la realización de tareas de diagnóstico y resolución de problemas de manera sencilla a través de un conector. Las averías se localizan antes y se resuelven de manera ágil.

El mantenimiento actual de las baterías es también mucho más práctico gracias a las facilidades de acceso y sustitución. La tecnología de iones de litio ofrece la ventaja añadida de poder realizar cargas rápidas de oportunidad y que los vehículos sigan en acción sin detener la actividad para sustituir la batería. Estas baterías ofrecen además una vida útil mucho más larga, por lo que no tendrá que renovarlas tan a menudo.

4. Mantener el valor de reventa de la carretilla

Las carretillas elevadoras eléctricas tienden a conservar un valor residual superior gracias a su fácil mantenimiento y al menor número de piezas de desgaste. Conforme crece la demanda de carretillas eléctricas usadas, estos valores también mejoran. Al elegir carretillas elevadoras eléctricas nuevas, busque vehículos con una construcción robusta que minimice las necesidades de reparación y sustitución de piezas. Para operar con humedad, suciedad, polvo u otro tipo de condiciones agresivas, es especialmente importante que los componentes principales estén protegidos herméticamente.

5. Ofrecer máxima potencia

Hoy día, las carretillas elevadoras eléctricas pueden proporcionar toda la potencia y la velocidad que desee. No solo eso: su rendimiento puede graduarse y ajustarse de manera inteligente para satisfacer sus necesidades. Como ejemplo, Cat® Lift Trucks ha desarrollado la función PowerBurst, que proporciona automáticamente un empuje de par adicional cuando es necesario para mantener la velocidad en rampas o acelerar a fondo. Esta función garantiza un rendimiento potente y fiable en cada momento, incluso con cargas pesadas.

Cuando la consistencia es una prioridad, las baterías de iones de litio son la mejor opción. Ofrecen una curva de tensión más constante en comparación con las de ácido-plomo. Ello evita las caídas de rendimiento del vehículo al final del turno.

6. Conducir con inteligencia integrada

En las carretillas contrapesadas eléctricas, los sofisticados sistemas electrónicos y el control inteligente multiplican el grado de satisfacción del conductor. Por ejemplo, existen carretillas que optimizan automáticamente la precisión de la conducción, la velocidad de giro y la estabilidad. Las carretillas elevadoras Cat® equipadas con el sistema RDS (Responsive Drive System) son especialmente inteligentes. Los conductores destacan que su vehículo parece saber cómo quieren que se comporte en cada momento.

7. Manejar cargas de forma inteligente

Puede encontrarse un control inteligente similar en los sistemas hidráulicos de algunas carretillas elevadoras eléctricas. La gama Cat, por ejemplo, cuenta con el ajuste de mástil por RDS, que adapta continuamente su posición en función del comportamiento del conductor. También está el sistema hidráulico de detección de carga SmoothFlow de Cat, que compensa continuamente el peso. El resultado es un control preciso, suave y consistente, incluso cuando se usan simultáneamente dos o más funciones hidráulicas.

Al elegir carretillas elevadoras eléctricas nuevas, busque vehículos con una construcción robusta que minimice las necesidades de reparación y sustitución de piezas.

8. Adaptarse a sus necesidades

Las carretillas elevadoras eléctricas ofrecen las mayores posibilidades para programar modos de rendimiento que satisfagan las necesidades de distintos conductores en múltiples tareas. Algunas carretillas ofrecen la opción de escoger entre varios modos predeterminados o usar ajustes completamente personalizables. Estos pueden ser configurados por los ingenieros de mantenimiento e incluyen velocidad de elevación, descenso y desplazamiento.

9. Mejorar la seguridad

Un control preciso de la conducción y el manejo de la carga es fundamental para el uso seguro de las carretillas. En los modelos eléctricos, este control se ve mejorado por sistemas y funciones como los mencionados en los puntos 6, 7 y 8. Las ayudas de seguridad complementarias habitualmente ofrecidas incluyen freno de estacionamiento automático y función de retención en pendientes. También pueden contar con interruptores en el asiento para impedir el desplazamiento y el movimiento hidráulico si el operario no está sentado.

10. Maximizar la agilidad

Las carretillas elevadoras eléctricas se maniobran de manera ágil y suave gracias, en gran medida, a sus precisos y sensibles sistemas de dirección. Algunas de ellas ofrecen tracción doble, contando cada una de las ruedas delanteras con su propio motor. Estas ruedas se controlan de forma inteligente y pueden girar en direcciones opuestas si es necesario.
A veces se combinan con un eje trasero que puede girar más de 100 grados. Ello permite giros laterales instantáneos, sin necesidad de maniobrar antes hacia atrás. El resultado es una agilidad excepcional a las cuatro ruedas.

Una opción que puede encontrar ocasionalmente en carretillas contrapesadas eléctricas de 3 ruedas es la dirección de 360 grados. El vehículo puede girar y avanzar en dirección opuesta sin detenerse, con solo una ágil maniobra. De ese modo, se logran velocidades de giro mayores pero seguras, y se reducen las fuerzas G sobre la carga.

11. Optimizar la ergonomía y el confort

El ruido y las vibraciones generados por una carretilla elevadora pueden agotar, estresar e incluso hacer enfermar a su conductor. Una de las primeras cosas que advierten los conductores al dar el salto a una carretilla contrapesada es su rendimiento silencioso, suave y con mínimas vibraciones. Aunque todas las carretillas elevadoras eléctricas presentan esta ventaja, algunos modelos cuentan incluso con bombas hidráulicas y transmisiones aún más silenciosas para ir un paso más allá en comodidad.

12. Reducir el coste total de operación

El coste total de operación de una carretilla elevadora es mucho más importante que su precio de compra, alquiler o leasing. Pasarse a una carretilla contrapesada eléctrica le ahorrará dinero continuamente. Pagará menos por la electricidad que use que lo que anteriormente gastaba en diésel o GLP. Las facturas de servicio y mantenimiento serán menores, y perderá menos producción por paradas de mantenimiento. Al mismo tiempo,
el vehículo mantendrá un buen valor de reventa a lo largo de su larga vida útil.

Una buena carretilla elevadora eléctrica aumentará su productividad gracias a una maniobrabilidad, un control y una precisión superiores. Su rendimiento controlado, junto con las funciones de seguridad automatizadas, reducirán el riesgo de sufrir accidentes y perder horas de mano de obra, con los costes que ambas situaciones conllevan. Por último,
su ergonomía y su comodidad contribuirán a reducir las bajas por enfermedad.