Sostenibilidad

¿Por qué la sostenibilidad es económicamente sensata?

Ser “verde” está muy de moda, y es algo que los clientes cada vez solicitan más de sus proveedores. Y lo que es más, las opciones respetuosas con el medio ambiente a menudo son más rentables económicamente.

En este artículo, Mark Nicholson expone las principales aspectos a tener en cuenta cuando se busca una carretilla elevadora “sostenible”.

Debería quedar claro desde el principio que este artículo trata de cómo ganar dinero, y no de cómo gastarlo. Se centra en ahorro de energía, material y costes de mantenimiento, en mantener la productividad y en hacer que su negocio funcione de manera más eficiente. Así que incluso si usted no se considera un ecologista, por favor, continúe leyendo.

Pero primero, permítame dar una definición rápida de lo que significa respetuoso con el medio ambiente, o sostenible, como se conoce a menudo. La sostenibilidad significa utilizar los recursos del planeta de manera que nos aseguremos de que no se van a agotar, y así evitar causar tal daño al entorno que destrocemos la calidad —o incluso la posibilidad— de vida en el futuro.

“La sostenibilidad significa utilizar los recursos del planeta de manera que nos aseguremos de que no se van a agotar, y así evitar causar tal daño al entorno que destrocemos la calidad —o incluso la posibilidad— de vida en el futuro.”

Recortar en consumo y en contaminación

La conservación de las riquezas naturales de la tierra —incluidos los combustibles— y la prevención de la polución y otros efectos destructivos son asuntos íntimamente relacionados que a menudo salen a relucir cuando se habla de operaciones de manipulación de productos y su equipamiento.

Uno de nuestros retos más obvios es reducir nuestro consumo de combustibles fósiles. A la vez que gastamos un recurso limitado, la combustión de estos materiales genera polución en forma de dióxido de carbono y de otras sustancias más tóxicas. Todo el mundo ya debería ser consciente de que la acumulación de dióxido de carbono y otros “gases invernadero” en la atmósfera está causando cambios negativos en el clima.

Además del combustible, nuestra industria consume materiales en la construcción y funcionamiento de sus vehículos e instalaciones asociadas. Muchos de estos materiales tienen que desecharse llegado el caso, y es cuando se convierten en potenciales contaminantes.

En este número de eureka nos centramos en la elección de carretillas que minimizan el impacto en el medio ambiente, pero similares argumentos económicos se pueden hacer para elecciones sostenibles en el diseño, equipamiento y prácticas operacionales en las instalaciones donde se desenvuelven.

Elegir la fuente de energía adecuada

Una de las primeras decisiones que debemos hacer cuando estamos eligiendo carretilla elevadora es qué fuente de energía utilizar. A menudo las opciones son diésel, GLP (gas licuado del petróleo), o batería eléctrica. El respeto al medio ambiente no ha de ser la única razón para elegir una carretilla; no tendría sentido comprar un vehículo especialmente “verde” si no puede llevar a cabo el trabajo para el que ha sido adquirido. La opción más verde variará dependiendo del uso que vayamos a hacer del vehículo, y en algunos casos, podría incluso ser el diésel.

Mucha gente automáticamente asume que una carretilla eléctrica será siempre más ecológica que una con motor de combustión interna. No es necesariamente así; pero si un negocio es capaz de obtener su electricidad de recursos limpios y renovables como el viento o la energía solar; entonces la carretilla eléctrica se convierte en la más respetuosa con el medio ambiente.

Mucha gente automáticamente asume que una carretilla eléctrica será siempre más ecológica que una con motor de combustión interna.

En cualquier caso, las carretillas eléctricas tienen otras grandes ventajas medioambientales. Una es que requieren menor mantenimiento y menor reposición de piezas que una carretilla con motor de combustión interna. Otra es que su rendimiento es programable, así que se pueden establecer parámetros de funcionamiento en los que el ahorro de energía sea una prioridad, y los operarios pueden ser “forzados” a conducir de manera segura y económica. Para trabajos de interior, donde las emisiones de los motores de combustión no están permitidas, las baterías o quizás las pilas de combustible en el futuro, son la única opción.

Objetivo: eficiencia energética

Una vez haya decidido su fuente de energía, tendrá que echar un vistazo a la información medioambiental que ofrece cada modelo y decidir cuáles son las carretillas más “verdes” que coincidan con sus necesidades de trabajo. Entre los asuntos clave a tener en cuenta se incluyen su eficiencia energética, las emisiones, la reciclabilidad y otras medidas de control de la polución y el desperdicio.

Los avances tecnológicos en los motores de combustión interna, como la última generación de catalizadores de triple vía disponibles para carretillas elevadoras a gas, reducen el consumo de combustible así como las emisiones. Al mismo tiempo, la eficiencia energética de las carretillas eléctricas también está aumentando conforme la tecnología electrónica se sofistica.

Usted también debería tener en cuenta que las carretillas eléctricas más avanzadas son las más versátiles en términos de programabilidad. Esto le permite configurar los parámetros de rendimiento perfectos para alcanzar el equilibrio entre economía y productividad que desee. También significa que a lo largo de los años usted puede reconfigurar su carretilla para afrontar nuevas necesidades en vez de desecharla, y comprar una nueva.

“Technological advances in IC engines, like the latest generation of three-way catalytic converters available for LPG trucks, are constantly reducing fuel consumption as well as emissions.”

Considere todos los costes

La energía no es el único coste permanente asociado a una carretilla. Otro es el gasto en mantenimiento y reparaciones. Tiene sentido económico y ecológico pagar un poquito más por una carretilla cuyos componentes sean duraderos, en vez de un modelo más barato que requiera recambios regularmente, más tiempo de trabajo del técnico del taller, y mayores periodos de inactividad que se pasan en el taller.

Usted puede buscar tecnologías de bajo desgaste como los frenos de disco húmedos, que prácticamente no tienen mantenimiento. También vale la pena optar por extras que reducirán el coste de un uso excesivo o de daños accidentales. Por ejemplo, en algunos productos un indicador del peso de la carga o de la altura de la horquilla ayudará a los operarios a evitar accidentes por exceder la capacidad de uso seguro de la carretilla.

La cantidad de refrigerante, aceite hidráulico y otros líquidos que usan las carretillas elevadoras varía de unas a otras. Este parámetro nos ofrece ahorros permanentes, al tiempo que reduce la cantidad de residuo tóxico que liberamos al medio ambiente llegado el momento.

Piense en el futuro

Algo más a tener en cuenta es el grado de reciclabilidad de los componentes de su carretilla. Esto puede que no tenga repercusión en su economía, pero tampoco le costará nada comprar una carretilla altamente reciclable y añadir así valor a su credibilidad como empresa “verde”.

Fabricantes como Cat® Lift Trucks construyen carretillas pensando en su reciclabilidad y su reacondicionamiento. Su fabricación permite que las piezas desgastadas o caducadas puedan cambiarse fácilmente, mientras muchos de sus componentes pueden ser reparados en vez de destruidos. Mantener las máquinas en funcionamiento en vez de desecharlas cuando se estropean es un buen principio “verde”. Tanto si mejora o reconfigura partes de su carretilla conforme sus necesidades cambian, como si vende la carretilla a un nuevo dueño, las personas y el planeta se benefician.

Si usted escoge una carretilla duradera y versátil no sólo será recompensado con un funcionamiento fiable cada día durante una larga vida, sino que también se beneficiará de un buen valor de recompra cuando decida venderla.

“Mantener las máquinas en funcionamiento en vez de desecharlas cuando se estropean es un buen principio “verde”.”

Enorgullézcase de ser verde

Como hemos visto, es posible tomar decisiones respetuosas con el medio ambiente que inmediatamente nos hacen ahorrar dinero o que a largo plazo son inversiones con una mayor rentabilidad. Hay otras características “verdes” que no afectan al coste de la carretilla pero le permiten hacer una mayor contribución a la protección del medio ambiente.

Si usted adopta esas medidas como parte de su política corporativa de responsabilidad social, asegúrese de contárselo a la gente. Son buenas noticias. Y si se siente generoso después de haber ahorrado dinero en los modos que hemos descrito más arriba, podría hacer una donación a una organización de conservación de la naturaleza. Esa organización, sin lugar a dudas, publicitará su aportación, lo que le ayudará a reforzar el mensaje positivo de que su empresa se preocupa por el medio ambiente; que en definitiva es lo que los clientes quieren escuchar.