Seguridad en movimiento

Herramientas para una conducción óptima de sus carretillas

Existe una velocidad correcta para cada actividad desarrollada con una carretilla elevadora: moverse demasiado rápido puede ser peligroso, y moverse muy lento reduce la productividad. Mark Nicholson analiza las funciones con que cuentan estos vehículos para lograr un movimiento óptimo.

En la clásica animación de Cat® Lift Trucks dedicada a la seguridad de las carretillas elevadoras, 7 Deady Sins, conducir demasiado rápido era el pecado capital número 3. Resulta obvio que una velocidad excesiva es un peligro para cualquier peatón situado en el área de trabajo de una carretilla. Este exceso de velocidad también aumenta el riesgo colisiones peligrosas contra estructuras y objetos como muros, estanterías y otros equipos, con el potencial de daños materiales que ello conlleva. Resulta especialmente importante doblar las esquinas con cuidado, ya que un vehículo girando a gran velocidad puede desestabilizarse y, en el peor de los casos, volcar.

Otro de los aspectos a considerar es si alguno de los movimientos que lleva a cabo el vehículo es demasiado rápido o brusco. Los giros de volante, los cambios de velocidad y los arranques y paradas repentinos pueden causar inestabilidad. La carga puede salir despedida de las horquillas y dañar artículos valiosos. Un trayecto tan accidentado puede además resultar incómodo y contraproducente para el propio conductor

Mejorar la seguridad y ahorrar dinero

Por las razones mencionadas, tratar de ir más rápido puede reducir el rendimiento y aumentar los costes. Un movimiento suave y sin precipitaciones a la hora de manipular materiales resulta clave para mejorar la productividad. También reduce el consumo energético de la carretilla elevadora.

Eso no quiere decir que deba hacer todo lentamente. Lo idóneo es moverse a la velocidad óptima para cada situación, ni demasiado rápido ni demasiado lento. Afortunadamente, los vehículos actuales disponen de funciones y tecnologías que pueden ayudarle.

Las ilustraremos aquí usando como ejemplo la gama de carretillas elevadoras Cat® EP40-55(C)N(H) de 4,0 a 5,5 toneladas. No obstante, puede encontrar capacidades similares en toda la gama de carretillas elevadoras contrapesadas, carretillas retráctiles y productos para el almacén de Cat.

Programación

Una de las herramientas más básicas para un control seguro es el límite de velocidad programado. En los modelos mostrados, puede elegir entre los modos de rendimiento preprogramados ECO y PRO.

El modo ECO restringe el rendimiento de varias formas. Ello reduce el riesgo de accidentes en conductores principiantes o poco experimentados, así como en empleados en prácticas o a tiempo parcial. También es posible elegir el modo ECO para ahorrar energía, o al manipular mercancía delicada.

El modo PRO brinda a los operarios experimentados un control más completo del rendimiento del vehículo, incluidas mayores velocidades.

Como alternativa, un técnico de mantenimiento puede configurar diversos parámetros, incluidas velocidad y aceleración, conforme a sus necesidades específicas.

Sistema de conducción de alta respuesta (RDS)

Estas carretillas de Cat hacen mucho más que dejarle elegir entre modos de rendimiento diferenciados. Efectúan ajustes automáticos continuos de las características de funcionamiento de acuerdo con las necesidades cambiantes del conductor. Esto es posible gracias al sistema de conducción de alta respuesta (RDS) de Cat.

El RDS monitoriza y responde a los cambios de velocidad en el pedal de aceleración del conductor y en el movimiento del control hidráulico. Estas indicaciones acerca de su comportamiento permiten al sistema saber cuándo surge una nueva situación o necesidad. El vehículo altera los parámetros en consecuencia. Los conductores dicen sentir que estas carretillas elevadoras están completamente sincronizadas con ellos, pareciendo saber exactamente cómo quieren que se comporten en cada momento. Una consecuencia importante es que todas las acciones hidráulicas y de conducción, incluidos los arranques y las paradas, tienen lugar de manera muy suave.

Control de curvas inteligente

Los sistemas para el control automático del doblado de esquinas evitan que los conductores tomen los giros a excesiva velocidad. A grandes rasgos, la velocidad máxima de la carretilla se reduce de manera directamente proporcional al ángulo de giro. En la práctica, sin embargo, el rendimiento de los sistemas más sencillos dista de ser perfecto.

Los diseñadores de Cat Lift Trucks han llevado el control de curvas inteligente a un nivel mucho más sofisticado. La reducción automática de la velocidad de desplazamiento tiene lugar mucho más suavemente, y la deceleración al comenzar el giro es relativamente pequeña. A medida que el volante gira de manera más pronunciada, el frenado también aumenta, pero manteniendo una progresión suave. El conductor no percibe un cambio brusco de velocidad ni que la carretilla se incline al girar. El movimiento se siente natural y cómodo.

Además, el sistema de control de curvas inteligente realiza una reducción en la velocidad de tracción para limitar las fuerzas laterales. Esta función aborda el problema que sufren las carretillas elevadoras al continuar en línea recta después de un giro pronunciado a gran velocidad. En tal situación, es posible que el contrapeso siga moviéndose lateralmente como resultado de las fuerzas centrífugas, realizando una especie de coleteo. Ello puede hacer que el vehículo pierda el agarre en su parte posterior, además de ser incómodo para el conductor. El sistema de Cat lo combate controlando el motor de tracción doble y limitando ligeramente el ángulo de giro.

Lo más importante es que estas mejoras permiten a los conductores girar de forma óptima, a la máxima velocidad segura para cada situación. De ese modo, pueden efectuar giros rápidos con confianza, sin necesidad de reducir demasiado ni aplicar una cautela excesiva.

Dirección adaptativa

La dirección adaptativa ajusta automáticamente la fuerza y la ratio de giro del volante en función de la velocidad de desplazamiento del vehículo. A velocidades elevadas, ayuda a mantener un movimiento estable, ya que aumenta la rigidez del volante. Si el conductor desea girar, deberá ejercer más fuerza. Además, tendrá que girarlo más grados para que las ruedas que controla giren.

Al desplazarse muy rápido en línea recta, esta función evita que pequeños movimientos del volante causen cambios mayores de lo necesario en el curso de la carretilla. Sin la dirección adaptativa, el conductor necesita a veces girar el volante constantemente a uno y otro lado para corregir desvíos indeseados.

Este mismo sistema contribuye a mantener la dirección estable al doblar curvas a gran velocidad. Inversamente, a velocidades de desplazamiento reducidas, la dirección se vuelve más ligera, con lo que la carretilla se puede maniobrar con un menor giro del volante.

El comportamiento del conductor

Aunque herramientas tecnológicas como estas son bienvenidas, debemos seguir haciendo hincapié siempre en el valor de los buenos hábitos de conducción. En particular, es fundamental reducir la velocidad al doblar las esquinas. También es importante conducir con suavidad, lo que implica evitar giros y acelerones bruscos, y anticiparse a las paradas reduciendo la velocidad gradualmente.

Es su responsabilidad supervisar y hacer cumplir estas buenas prácticas. Los sistemas telemáticos de las carretillas elevadoras modernas pueden ser muy útiles en ese sentido, al registrar datos sobre la conducción: velocidad excesiva, aceleración y frenado bruscos, doblado rápido de las esquinas, etc. Si detecta cualquier comportamiento problemático en los conductores, puede ayudarlos con formación adicional o cursos de refresco.